El día a día podría estar afectando tu sentido de felicidad y balance. Cuanto más haces, menos satisfecho te sientes. Te preocupas por lo pequeño y lo grande sin parar, sabes que tiene que terminar, y a veces puedes manejarlo pero otras te consume. Tu mente va a mil por hora y tu cuerpo lo siente. Tu cerebro no puede concentrarse y comienza a afectar tu rendimiento, tus actividades, tus relaciones y tu salud.
“Puedes hacer cualquier cosa, pero no todas las cosas”
Si esto te suena conocido, estoy segura que puedo ayudarte. Cuando se trata de tratar los trastornos de ansiedad, la investigación científica muestra que la terapia suele ser la opción más efectiva. Esto se debe a que la terapia, a diferencia de los medicamentos para la ansiedad, trata más que sólo los síntomas del problema. La terapia puede ayudar a descubrir las causas debajo de tus preocupaciones y miedos, puedes aprender a relajarte, mirar las situaciones de una manera nueva y menos aterradora, y desarrollar mejores mecanismos de afrontamiento y habilidades para resolver problemas. Puedo darte información valiosa para ayudarte a comprender los principios y estrategias básicos para controlar el estrés y mejorar la forma en que reaccionas ante los acontecimientos de la vida. ¡No tienes que hacerlo solo! Si bien todos experimentamos momentos en los que el nerviosismo o la preocupación surgen en nuestras vidas, cuando se convierte en una preocupación constante, es hora de pedir ayuda. Si deseas explorar las opciones de tratamiento, ponte en contacto. No necesitas hacer esto solo.